La mayor parte de la gente que vea este cuadro por primera vez no sospecharán que su autor es Pablo Ruiz Picasso. Se trata de una obra de juventud impregnada del realismo social de la época en que fue pintada, el año 1897 cuando el pintor tenía 16 años de edad. Se trata de un oleo sobre lienzo de 197 X 249,5 centímetros.
La temática también era muy del gusto de la época. Muchas son la obras del siglo XIX con el tema de la enfermedad y la salud. En este caso, Picasso quiere poner de manifiesto la relación entre la ciencia, el médico, y la caridad, la monja. Estos personajes aparecen al lado de la paciente a cada lado de la cama.
El médico que aparece en el cuadro es el padre de Picasso, que le sirvió de modelo. El padre fue un pintor sin éxito que se ganaba la vida como profesor de dibujo. Al comprobar que su hijo tenía grandes aptitudes artísticas no dejó de apoyarle en su carrera. Picasso ingresó en la Escuela de Bellas Artes de Barcelona donde pintó este cuadro. Su calidad fue rápidamente reconocida y la obra fue presentada en el año 1897 en la Exposición de Bellas Artes de Madrid, donde obtuvo una mención de honor, y posteriormente en la Exposición Provincial de Málaga donde obtuvo la medalla de oro.
La monja que aparece en la obra representa a sor Angeles Castelldefels, una hermana de la caridad que había atendido a la madre del pintor durante una enfermedad. La monja no posó para la pintura, fue preciso contratar a una modelo. No así en el caso del médico, para el que posó el padre de Picasso personalmente.
Este cuadro se encuentra en el museo Picasso de Barcelona.