Edgar Allan Poe fue uno de los primeros escritores americanos en obtener un reconocimiento internacional. Hasta entonces se consideraba que solo los escritores británicos podían escribir auténtica literatura en inglés, por lo que las primeras obras de Poe fueron poco apreciadas por los escritores de la metrópoli. Aunque su vocación temprana era la poesía, Poe se vio obligado por motivos económicos a escribir cuentos que eran publicados en los periódicos locales. Sus cuentos de misterio y terror todavía hoy en día se admiran como las verdadera obras de arte que son. En su corta vida, pues muere a los 40 años de edad, publica cientos de cuentos y numerosos poemas, entre los que destaca El Cuervo, considerado todavía hoy uno de los poemas más importantes de la literatura moderna. A pesar del reconocimiento, aunque algo tardío, de su obra, Edgar Allan Poe nunca salió de la pobreza. Eran tiempos en los que los derechos de autor no eran respetados y en los que la prensa, en la que aparecían los cuentos y poemas de Poe, apenas podía pagar a sus colaboradores. Muchas de sus cabeceras frecuentemente desaparecían por motivos económicos y Poe apenas tenía para malvivir. Incluso cuando obtuvo un empleo de crítico literario, este trabajo le dio cierto renombre pero no le sacó de la pobreza.
Poe cayó en la dependencia del alcohol, posiblemente empujado por sus problemas económicos y personales. Después de su muerte, solo después de su muerte, la obra de Poe alcanzó el reconocimiento que no había alcanzado en vida del escritor. Se han publicado casi 50 biografías de Poe y en 1921 se erige en Baltimore una estatua que todavía puede verse en el Wyman Park, estatua encargada por la Fundación Shakespeariana americana. Pues, ¿acaso no fue Poe el Shakespeare americano?
EL COMIENZO DE UNA HISTORIA
El Abuelo de Edgar fue el general David Poe que luchó contra los ingleses en la guerra de la independencia americana. El general Poe tuvo siete hijos, dos de los cuales fueron importantes para nuestra historia. El mayor, también llamado David Poe, y una hija, María Poe que ha pasado a la historia con su nombre de casada, María Clemm.
David Poe, el hijo mayor del general, se dedica al teatro y se casa con una actriz, Elisabeth Arnold. El matrimonio tiene tres hijos. El mayor se llamaba William Henry Poe, fue marino de profesión y murió muy joven de las secuelas del alcoholismo y la tuberculosis. El segundo sería Edgar y la tercera Rosalie.
El matrimonio de David y Elisabeth nunca salió de la pobreza pues como cómicos ambulantes no tenían ingresos fijos. En una de sus giras recalan en Boston donde nacería Edgar el 19 de enero de 1809. El padre, David Poe, deprimido y alcohólico, abandona a su familia y desaparece sin dejar rastro. Nunca más sabremos de él. Su madre, Elisabeth, en esos momentos embarazada de quien sería su hija, era una buena actriz y se mantiene sobre los escenarios. Estando en la ciudad de Richmond da a luz a su hija Rosalie. Pero enferma de tuberculosis fallece en noviembre de 1811.
HUERFANOS ADOPTADOS
A la muerte de Elisabeth quedan tres hijos huérfanos. El mayor, William fue a vivir con su tía María Clemm en cuya casa murió como hemos dicho más arriba. Edgar fue adoptado por la familia de un comerciante de origen escocés, John Allan. Su esposa Frances, acogió al pequeño Edgar como el hijo que no tenía. Edgar siempre la llamaría madre, la madre que le colmó del cariño que tanta falta le hacía. En esta familia Edgar añadió a su nombre el segundo nombre de pila de su padrastro, Allan. Desde entonces Edgar se llamaría Edgar Allan Poe, nombre con el que ha pasado a la historia.
Su hermana Rosalie, casi recién nacida fue adoptada por otra familia importante de Richmond, los Mackenzie. La pobre niña contrajo una meningitis a los doce años de edad. Como consecuencia sufrió un retraso mental que la acompañaría el resto de su vida.
LA EDUCACION DE EDGAR
La familia de acogida de Edgar era una familia bien acomodada en la ciudad de Richmond en el estado de Virginia. Su padre adoptivo, John Allan, era un próspero comerciante que había hecho fortuna con los negocios del tabaco, granos, tejidos, te, vinos, licores y esclavos. Hombre religioso, era asiduo a la iglesia episcopaliana de su ciudad. En 1815, cuando Edgar tenía solo 6 años de edad, toda la familia Allan hace un viaje a Escocia pues el Sr. Allan deseaba conocer los orígenes de su familia. Este viaje dura 5 años y Edgar es escolarizado haciendo progresos en sus conocimientos del latín y el francés.
En 1820 la familia regresa a Richmond y Edgar es matriculado en un prestigioso colegio privado donde se muestra como un buen estudiante. Progresa en el estudio de los clásicos y es capaz de leer a Ovidio, Cicerón, Homero y Jenofonte.
En 1826, completados los estudios primarios, se matricula en la Universidad de Charlottesville, en Virginia. De nuevo destaca en el estudio de los clásicos, haciendo progresos en el latín y el griego y también en los idiomas modernos como el francés, el italiano y el español.
Los alumnos de la universidad eran los hijos de los adinerados empresarios y comerciantes de Virginia. Aunque John Allan financiaba todos los gastos académicos de Edgar, los recursos no llegaban para igualarse a otros estudiantes en gastos para fiestas y diversiones. Edgar intentaba estar a la altura de sus compañeros con mucha dificultad. En esta época comenzó a beber y se aficionó al juego y por ambos motivos acumuló importantes deudas. Deudas de honor que había que pagar. Su padrastro, John Allan, se niega a responder a las deudas que ascendían a 2.500 dólares, una cantidad enorme en aquellos tiempos, ni a seguir pagando unos estudios que se habían desviado de su proyecto académico, por lo que Edgar ha de abandonar la universidad.
Las desavenencias entre John Allan y Edgar llegan al límite y la convivencia se hace imposible. En marzo de 1827 Edgar abandona la que había sido su casa y su familia. Tenía 18 años de edad.
EL EJERCITO COMO SOLUCION
Edgar se dirige a Boston, su ciudad natal. En esta ciudad publica su primer libro de poemas, Tamerlan, que obtiene buenas críticas. Pero la literatura no le da para poder vivir por lo que Edgar decide alistarse en el ejército. En mayo de 1827 se alista en el regimiento de artillería de Fort Independence en Boston. No le va mal en el ejército y llega a ascender hasta el grado de sargento mayor. Al mismo tiempo sigue escribiendo y publica otra de sus obras tempranas, Al Aaraaf, que obtiene buenas críticas.
En febrero de 1829 muere de tuberculosis Frances Allan, la persona a quien Edgar siempre llamó madre. La muerte de Frances, que siempre quiso a su hijastro a pesar de su separación, distancia a Edgar aun más de su familia adoptiva.
Al alcanzar el grado de sargento mayor en el regimiento de artillería, Edgar tiene derecho a ingresar en la academia de West Point, donde se forman los futuros oficiales del ejército de los Estados Unidos. Se incorpora en mayo de 1830. Pero Edgar no se adapta al rígido reglamento de la academia, con sus estrictos horarios y la consiguiente disciplina. No cumple los horarios de grandes madrugadas y tempranos toques de queda. En febrero de 1831 un tribunal militar decide su expulsión con cargos de indisciplina y desobediencia. Edgar se encuentra sin trabajo, sin dinero y sin residencia estable.
EXPULSADO DEL EJERCITO TIENE QUE BUSCARSE LA VIDA
No le queda más remedio que irse a vivir a casa de su tía María Clemm, que vivía en Baltimore con su pequeña hija Virginia y sin más ingresos que una pequeña pensión de viudedad. Edgar busca trabajo sin descanso y lo busca en diversos periódicos e incluso como profesor, sin éxito. Por fin consigue que uno de sus cuentos, El Manuscrito Encontrado en una Botella, sea premiado en un concurso literario. El premio es de 50 dólares, que equivalía al sueldo de un periodista durante un mes.
SE CASA CON SU PRIMA VIRGINIA
En mayo de 1836 se casa con su prima Virginia, la hija de María Clemm. Edgar tiene 27 años y Virginia aún no ha cumplido los 14. Para obtener el contrato matrimonial han de
declarar, bajo juramento, que la novia tenía 21 años de edad. Virginia sería el verdadero amor de un deprimido pero enamorado Edgar.
SU VIDA COMO ESCRITOR. LA PRENSA COMO UNICA SOLUCION
Finalmente es contratado, con un pequeño sueldo fijo, por un periódico de Richmond, el Southern Literary Messenger. En este periódico publica numerosos cuentos y ejerce de crítico literario. Como crítico alcanza una merecida reputación pero poco dinero. En 1836 ya es redactor jefe aunque tiene contantes problemas con el propietario del periódico a causa de los problemas de Edgar con el alcohol, que afectaban a la regularidad de su trabajo por lo que es despedido en enero de 1837. Los problemas con el alcohol, aunque fuese de forma intermitente, no le abandonarían nunca.
Entre tanto, en marzo de 1834 muere John Allan, el padre adoptivo de Edgar. Estaba enfermo desde algún tiempo antes y Edgar decidió irá visitarle pero su padrastro no quiso recibirle. John Allan se había casado de nuevo y tenía un hijo al que llamó William. La ejecución del testamento no fue fácil, pues el Sr. Allan tuvo varios hijos ilegítimos mientras estuvo casado con Frances, su primera esposa. No todos estos hijos fueron reconocidos ni atendidos en el testamento. A Edgar no le dejó ni un céntimo.
La familia, Edgar, Virginia y María, se traslada a Nueva York donde María Clemm consigue abrir una pensión de huéspedes con lo que tienen un modesto ingreso que les permite vivir sin demasiados aprietos. Edgar a estas alturas ya es conocido como crítico literario por su trabajo en el Southern Literary Messenger pero aun así tiene dificultades para encontrar un trabajo estable. Publica algunos cuentos que no son remunerados.
De nuevo en marcha, esta vez a Filadelfia donde el editor Harper, que le reprochaba que escribiese solo cuentos cortos, le había pedido una obra más extensa. Es entonces cuando escribe la que sería una de sus obras más conocidas, Las Aventuras de Arthur Gordon Pym. Esta obra aparece en forma de libro y no en un periódico como hasta entonces. Fue un libro de cierto éxito con el equívoco de si Gordon Pym era el propio Edgar Allan Poe y si las aventuras que aparecían en el libro eran reales o no. Como a pesar de todo no salía de la pobreza, publicó un libro sobre conchas marinas solo por motivos comerciales. Sigue publicando cuentos en diversos periódicos que le pagan 10 dólares por cada uno.
EL INTENTO DE PUBLICAR SU PROPIA REVISTA TERMINA EN FRACASO
Edgar tenía un sueño que cumplir, editar su propia revista literaria que había de llamarse Penn (por Pensilvania) Magazine. Pero este intento terminó en un sonoro fracaso porque los editores y los bancos finalmente le abandonan. Para ganarse la vida no tiene más remedio que aceptar un puesto de redactor jefe en el periódico Graham´s Magazine. Edgar ya tenía cierto renombre como crítico literario y escritor de cuentos, habilidades que podían aprovecharse en una publicación literaria.
Pero el fracaso del Penn Magazine hunde moralmente a Edgar que vuelve a beber intensamente. Bebe brandy, oporto, sidra, ron y absenta. El resultado, intensas jaquecas, pesadillas y alucinaciones. Renuncia a su puesto en el Graham´s Magazine en mayo de 1842. Hace un intento de encontrar trabajo en Washington, donde sigue bebiendo intensamente por lo que es rechazado por la mala impresión que ofrece se ve obligado a regresar a Filadelfia.
Deja de beber y su
condición personal mejora. Entre 1843 y 1844 da varias conferencias sobre poesía en Filadelfia con gran éxito de crítica y público. Es una de las buenas épocas de Edgar, que siempre se presenta muy bien vestido, elegante y pulcro dando una excelente impresión.
Pero quería seguir publicando y a finales de 1844 se traslada a Nueva York donde consigue publicar bastantes cuentos. Es entonces cuando publica una de sus grandes obras poéticas. Hemos de recordar que Edgar siempre quiso ser poeta. Sus primeras obras de juventud, Tamerlan y Al Aaraaf fueron poesías. Escribía prosa en forma de cuentos porque se vendían mejor y tenía que ganarse la vida. Y es en enero de 1845 cuando publica El Cuervo (The Raven), un poema que aún hoy en día es considerado uno de los mejores poemas en lengua inglesa. Poema que ha sido traducido a numerosos idiomas. Los editores, conscientes de la calidad de este poema, organizan un gran lanzamiento y la obra es publicada simultáneamente por más de veinte periódicos de América y Europa.
MUERE SU ESPOSA VIRGINIA. DEPRESION, MAS ALCOHOL E INTENTO DE SUICIDIO
Pero las desgracias no tardarían en llegar de nuevo. El 30 de enero de 1847 muere Virginia, su querida esposa, de tuberculosis pulmonar. Edgar cae en una profunda depresión. Su salud, no demasiado buena, se resintió. Fiebre y bajas pulsaciones. La fiebre le hacía hablar sin coherencia. Sus amigos llaman a consulta a un prestigioso médico, el Dr. Valentín Mott, miembro de la Academia de Medicina de Nueva York, que hizo en diagnóstico de un incipiente derrame cerebral.
En el otoño de 1848 se produce un episodio que se ha interpretado como un intento de suicidio. Edgar compra dos onzas de láudano, un derivado del opio, que en aquellos tiempos podía adquirirse sin receta médica. Va a correos a echar una carta pero antes de ir se toma una onza de láudano. Antes de entrar en la oficina de correos se encuentra mal, vomita y pierde la conciencia. Los transeúntes se detienen sorprendidos al verle tendido en la calle. Edgar nunca dio explicaciones sobre cuál fue su intención al tomar este medicamento, pero no cabe duda de que el vómito le salvó la vida. Seguía bebiendo y las borracheras eran frecuentes. Su estado de ánimo era cada vez peor y en un momento llegó a decir que quería morir, que ya no tenía más deseo de vivir.
HACIA EL FINAL. EL ULTIMO VIAJE
En julio de 1849 Edgar se encuentra en Richmond donde dio una serie de conferencias sobre poesía con cierto éxito de público lo que le proporcionó algo de dinero. Pasó unos días en casa de los Mackenzie, donde vivía su hermana Rosalie. Su aspecto era lamentable y su vestimenta sucia y desordenada. Asustados por su aspecto y la sospecha de haber bebido abundantemente, los Mackenzie llamaron al Dr. Gibbon Carter quien después de examinarle le advirtió que de seguir así el desenlace sería fatal. Se entiende que el seguir así se refería a seguir bebiendo alcohol.
Cuando terminó la serie de conferencias, Edgar se encontraba contento y animado por el éxito conseguido. Decidió viajar a Filadelfia donde le esperaba un encargo editorial. Se despidió de sus amigos y del Dr. Carter a quien visitó probablemente por motivos de salud. Al marcharse de la consulta del doctor, seguramente sin mala intención, se llevó consigo un valioso bastón estoque propiedad del médico. Camino de Filadelfia, debía hacer una escala en Baltimore. Nadie podía sospechar que sería su último viaje.
UN HOMBRE TENDIDO EN LA CALLE
En Baltimore, en la tarde del día 3 de octubre de1849, un hombre yacía en la acera sin que nadie le prestara atención. Uno de los viandantes era el impresor Joseph Walker, que se dio cuenta de que se trataba del escritor Edgar Allan Poe, a quien conocía bien. Como pudo, el impresor llevó el cuerpo casi inerte de Edgar al Sergeant´s Tavern que se encontraba cerca. Semi inconsciente y con la ropa manchada, Edgar pudo decir el nombre de un médico y escritor que conocía, el Dr. Snodgrass que vino rápidamente a socorrerle. Inmediatamente fue llevado al Washington College Hospital, uno de los hospitales más prestigiosos de Baltimore. Fue recibido por el médico de guardia, el Dr. John Moran que decretó el ingreso inmediato de Edgar. Los cuidados a que fue sometido fueron infructuosos y el escritor Edgar Allan Poe falleció cuatro días después, el 7 de octubre de 1849.
LA CAUSA DE SU MUERTE
Sobre las causas de su muerte, se ha especulado mucho, como suele ser habitual en el caso de individuos célebres sobre los que no hay demasiada información. Pero la información más fiable la encontramos en una carta que escribió el Dr. John Moran, que le atendió en sus últimas horas de vida. Fue escrita el 15 de noviembre y dirigida a la Sra. María Clemm, que era el único familiar conocido. En esta carta el Dr. Moran confirma la muerte de Edgar, noticia que de alguna manera ya había llegado a oídos de la Sra. Clemm. En la carta el Dr. Moran hace una descripción muy detallada del proceso que llevó a Edgar a la muerte. Refiere que cuando llegó al hospital estaba inconsciente. Cuando recupera la conciencia comienza a temblar y a ver extrañas formas proyectadas sobre las paredes, a las que se dirigía con palabras inconexas. Es una descripción de las típicas alucinaciones. Cuando se sobrepone a esta fase parece darse cuenta de lo grave de su situación y dice que lo mejor que pueden hacer con él es saltarle la tapa de los sesos con una pistola. Poco después entra en un violento delirio resistiéndose a los esfuerzos de sus cuidadores para mantenerle en la cama. Agotado por estos esfuerzos, debilitado, se calma y poco después expira.
En esta carta el Dr. Moran no hace sino describir un típico delirium tremens característico del alcoholismo avanzado. En el certificado de defunción se menciona una congestión cerebral como la causa de la muerte.
UN ENTIERRO MODESTO Y CASI SOLITARIO
Edgar Allan Poe fue enterrado en el cementerio presbiteriano de Green Street. Fue una rápida ceremonia a la que solo asistieron el Dr. Snodgrass, El Sr. Collins Lee que era un antiguo compañero de escuela y dos parientes lejanos que vivían en Baltimore, los señores Herring y Nelson Poe. La ceremonia apenas duró 3 minutos. Sobre la tumba se colocó una lápida de gres identificada con el número 80.
La policía hizo una somera investigación sobre lo sucedido, llegando a la conclusión de que el Sr. Poe había sido agredido por unos delincuentes para robarle. Nunca se encontró el baúl con sus pertenencias y le habían despojado de parte de su ropa. Sin embargo no le robaron el valioso bastón estoque que se había llevado de la consulta del Dr. Carter.
ESPECULACIONES SOBRE LAS CAUSAS DE SU MUERTE
Edgar Allan Poe murió en la miseria. Cuando fue recogido en la calle, en su ropa no se encontró ni un solo dólar. Su modesto sepelio fue costeado por sus amigos. En aquellos tiempos no existían los derechos de autor. Si solo tenemos en cuenta los artículos y cuentos que se le pueden atribuir con seguridad (había escrito muchos sin firma o con seudónimo) tenemos 855 en total, por los que su autor solo cobró alrededor de 300 dólares en toda su vida. Su padre adoptivo, John Allan, ya se lo advirtió: el talento jamás dará bienestar a su poseedor.
Sobre otras posibles causas de su muerte se ha especulado mucho. Cuando Edgar ingresa en el hospital es atendido por el Dr. Moran, joven médico de 25 años de edad, que no tenía ni idea de quien era su paciente. Cuando se enteró de que se trataba de un famoso escritor, dedicó gran parte de su vida en revindicar a Edgar Allan Poe y para ello le pareció importante negar la sospecha de alcoholismo, pues le parecía algo impropio de un gran escritor. El Dr. Moran dio numerosas conferencias sobre la muerte de Poe e incluso escribió un libro, Defensa de Edgar Allan Poe, en el que aseguraba que al ingresar en el hospital no mostraba ninguna evidencia de haber ingerido bebidas alcohólicas. Incluso mencionaba que se le ofreció un ponche para restablecerse, y Edgar se negó a tomarlo, algo que nunca haría un alcohólico.
Mas adelante, cuando ya todo el mundo reconocía a Edgar Allan Poe como un gran escritor, aparecieron numerosos informes, generalmente escritos por médicos, intentando resolver a posteriori el misterio de su muerte. Y en todos los casos negando el alcohol como posible causa. Así su muerte se ha atribuido a intoxicación de monóxido de carbono emanado de las lámparas de gas que iluminaban en aquellos días las ciudades de Filadelfia, Baltimore y Nueva York. También a la intoxicación de mercurio, que contenían los preparados de láudano que según algunos autores el autor tomaba con frecuencia para combatir los episodios de taquicardia de origen nervioso. Incluso hay autores que han insistido en enfermedades como la sífilis y la rabia, de las que no hay ninguna prueba, con los datos de que disponemos. En realidad, solo es fiable lo que el Dr. Moran describe en su carta a la Sra. María Clemm el 15 de noviembre de 1849 en la que se describen de forma bastante precisa los síntomas de un delirium tremens típico de un síndrome de abstinencia alcohólico. No queda más remedio que aceptar que Edgar Allan Poe era un alcohólico, como se aprecia a lo largo de su biografía, y que falleció a causa de una de sus complicaciones.
EL RECONOCIMIENTO TARDIO
Como suele ser frecuente, el reconocimiento de un gran hombre llega después de su muerte. Eso se refleja en las más de 50 biografías que se han escrito, empezando por la primera de 1880 escrita por John Ingram.
Y no fue hasta 1921 cuando la Sociedad Shakesperiana de Nueva York, por indicación de su entonces presidente Appleton Morgan, erigió una estatua de Edgar Allan Poe en la que aparece majestuosamente sentado, y que se instaló en el Wyman Park de Baltimore. También en 1921 se inaugura el museo de Poe en la ciudad de Richmond, en el estado de Virginia.
El albacea testamentario de la obra literaria de Poe sería Rufus Wilmot Griswold, autor de una antología de poetas americanos. Los derechos de autor a que hubiera lugar se otorgaron a María Clemm para ayudarla económicamente.
En 1875 se construyó un monumento funerario de granito y mármol para contener los restos de Poe. Fue inaugurado con un discurso académico y la Sociedad Filarmónica de Baltimore entonó el Stabat Mater de Rossini. Los restos de su esposa Virginia, que había sido enterrada en el cementerio de la iglesia holandesa reformada de Fordham en Nueva York, fueron trasladados a Baltimore y enterrados junto a su marido.
María Clemm sobrevivió 25 años a su “hijo” Edgar. Rosalie también sobrevivió 25 años a su hermano.
Para realizar este artículo nos hemos ayudado de los siguientes textos.
Georges Walter. Poe. Editorial Anaya y Mario Muchnik. Barcelona 1995.
Philip A. Mackowiak, MD. Post Mortem. Ed. American College of Physicians. 2007
Linus Fontrodona. Edgar A. Poe. Historia y Vida. Numero 201. Diciembre 1984