Jan de Doot era un herrero de la ciudad de Amsterdam que sufría de continuos dolores debidos a un cálculo en la vejiga de la orina, problema frecuente antes de desarrollarse la cirugía de la próstata para aliviar la obstrucción urinaria. La historia de Jan de Doot nos ha llegado a través del relato de Nicolaes Tulp en Observationes Medicae de 1672
La historia es como sigue: en el año 1651, Jan de Doot decide poner fin a sus dolores operándose a sí mismo. Para ello, usando un cuchillo de cocina y ayudado por su hermano que separó el escroto, se hizo una incisión en el periné hasta llegar a la vejiga. Introdujo los dedos por le herida y extrajo el cálculo. Se supone que la intervención se hizo sin anestesia y que la evolución fue favorable.
El cuadro, un óleo sobre lienzo pintado en 1655 por Carel van Savoyen, muestra a Jan de Doot después de la intervención mostrando en su mano derecha el cálculo extraído y con su mano izquierda sostiene el cuchillo con el que se operó.
Este cuadro se conserva en la colección de pintura del Servicio de Patología de la Universidad de Leiden.