Fernando VII, rey de España, muere en el año 1833. El cuadro más conocido que representa este momento es el pintado por Federico de Madrazo y que puede ser encontrado fácilmente por nuestros lectores en libros de arte e incluso en internet. En esta obra aparece el rey en su lecho de muerte, a su lado la reina María Cristina y alrededor toda una serie de personajes de la corte.
Pero hemos escogido una obra mucho menos conocida y de aspecto mucho más dramático, menos solemne. Se trata de un grabado de 1845 que en la actualidad se encuentra en el museo Zumalacarregui de Guipuzcoa. Reconocer a sus autores es difícil pues no se dispone de datos seguros. Incluso en la reseña el museo Zumalacarregui solo se menciona, sin más detalles, a los autores que aparecen en el propio grabado, Mendez el dibujante y Chamorro el grabador.
En el siglo XIX encontramos pocos pintores con el nombre de Mendez que pudiesen ser los autores. José Mendez Arias (1818 – 1891) tiene un estilo muy distinto y es poco probable que sea el autor buscado. Mariano Mendez Bringa (1868 – 1933) fue un reconocido ilustrador que publicó gran parte de su obra en el semanario Blanco Y Negro y tiene algunos dibujos que pueden parecerse. Pero por su edad, es imposible que sea el autor de esta obra.
En cuanto al grabador, es posibel que se trate de Pedro Chamorro Baquerizo, comandante de infantería y al mismo tiempo grabador de gran prestigio. Pero entre los grabados que hemos podido ver de este autor, no figura el que nos ocupa. Bien es cierto que la obra de Chamorro es muy extensa y no hemos podido consultar la totalidad de sus grabados.
En cualquer caso todo es especulación, pues no hemos podido confirmar de forma inequívoca a que autores podemos atribuir esta obra.