Este es el último cuadro pintado por Toulouse Lautrec. Lo pintó en 1901, el mismo año de su muerte cuando ya se había retirado a casa de su madre aquejado de las secuelas del alcoholismo y la sífilis.
Este cuadro destaca dentro de la producción del pintor que es más conocido por reproducir imágenes de bailarinas, prostitutas y burdeles que tan bien conoció durante su vida bohemia en el Montmartre parisino.
Henry de Toulouse Lautrec nació en 1864 en la ciudad francesa de Albi. De familia burguesa bien acomodada decidió lanzarse a la vida bohemia de París. Probablemente esta decisión fue condicionada por un severo defecto físico que sufrió el pintor cuando era un niño. Seguramente sufría un defecto congénito de los huesos que propiciaron que se fracturase el fémur de ambas piernas. La consolidación fue defectuosa lo que impidió el normal crecimiento del pintor, que apenas alcanzó los 1,5 metros de estatura. Esto fue causa de su infelicidad y complejo de inferioridad que, sin duda, fue la causa de su caída en la bohemia.
Conoció bien la vida nocturna de los bajos fondos, los prostíbulos y los cabarets de París, especialmente el Moulin Rouge, que inspiraron su obra pictórica. Afectado por el alcoholismo y la sífilis, se retiró a casa de su madre donde falleció en 1901 a los 36 años de edad.
El cuadro que presentamos muestra su primo Gabriel Tapie de Celeyran defendiendo su tesis médica en la facultad de medicina de París. También aparecen en el cuadro los profesores que le examinan, Felix Wurth y Alfred Fournier.
Se trata de un óleo sobre lienzo de 81 X 65 centímetros y que se conserva en el museo Toulouse Lautrec de la ciudad de Albi.